viernes, 18 de septiembre de 2009

Alguna vez lo vi

Tal como se recuerda, qué queréis que os diga.

... Y Buck bajó de las cumbres con un mal presentimiento que poco tardó en tomar forma, cuando encontró a su único y verdadero amigo humano asesinado por la espalda. Las risotadas, los ebrios alientos y los machetazos seguían impregnando la nieve junto a aquellas pisadas extrañas y dispersas. Todo quedó allí, pero esos no lo sabían. Para él no existían testigos mudos. Todo cuanto observaba le decía algo. Fue cuando entendió que los autores de aquella masacre sin razón tenían que ser animales en lugar de humanos, que él mismo poseía más humanidad que ninguno de ellos. Pero no fue este detalle último lo que lo empujó a vengarse heroicamente.

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